VOLVIMOS DE LAS FIESTAS… ¡CON MÁS FIESTA!

 ¡Hola peques!

¡Hola familias!

Volvimos de las fiestas y ya nos queda un último empujón para acabar el curso.

Esta semana tuvimos el cumpleaños de nuestro compañero Amani.

Quiso celebrarlo con todos/as nosotros/as con una rica merienda y algunos dulces, que sabe que nos encantan. Y nosotros/as, como siempre, se lo agradecimos un montón con un súper abrazo.

También le hicimos un dibujo precioso para que tenga de recuerdo

Y, cómo no, cantamos el cumpleaños feliz, pedimos deseos y soplamos la vela ¡4 veces!

Muchas felicidades, Amani. Deseamos que hayas pasado un bonito día y que todos tus deseos se cumplan.

Pero no todo van a ser fiestas en esta clase… ¿o sí?

Volvemos a China, país que nos despierta gran curiosidad por muchas cosas.

Si recordamos, la semana pasada hicimos unos farolillos y vimos cómo los lanzaban al cielo en China. Pues bien, la mamá de Maddi, Cristina, quiso compartir con nosotros/as una fiesta medieval de Monforte en la que lanzaron farolillos ¡y Maddi estuvo allí! Cuando pusimos los vídeos en clase quedaron alucinados. Os los dejo por aquí porque son preciosos. Muchísimas gracias, Cristina, por compartirlos con nosotros/as.

Y, para terminar con nuestros farolillos, quisimos decorar con nuestros nombres uno enorme. Aún faltamos algunos/as por firmarlo, lo terminaremos la próxima semana.

Si recordamos, la semana pasada nos encontramos un dragón enorme en nuestra puerta. Pues bien, era su turno.

El dragón chino es un animal mitológico y legendario de China y de otras culturas asiáticas que dispone de partes de nueve animales: ojos de langosta, cuernos de ciervo, morro de camello, nariz de perro, bigotes de bagre, melena de león, cola de serpiente, escamas de pez y garras de águila.

En cuanto a su significado, se trata de un símbolo de poder y benevolencia en la cultura popular china, con su teórico control sobre las aguas. Por ejemplo, invocando a la lluvia en épocas de sequía. Son vistos como afortunados y buenos, contrariamente a la representación occidental de los dragones.

Nosotros, como no podía ser de otra manera, quisimos hacer nuestros propios dragones. Primero, escribimos la palabra dragón y le colocamos tiras de papel celofán simulando el fuego que sale de su boca.

Segundo, vimos un corto sobre “El dragón Zog”, que se trata de un dragón muy bueno pero un poquito torpe.

Tercero, hicimos nuestros propios dragones con un cuerpo de acordeón (o de escalera como dicen algunos/as) para que nos den suerte.

Y así nos quedaron. Vamos a rugir como los dragones que tenemos entre las manos… ¡cuidado!

Pero si hablamos de China y de animales hay uno que no se nos puede pasar por alto. ¿Sabéis cuál es?

EL OSO PANDA.

Sabemos que es de color blanco y negro y que están en peligro de extinción. Su nombre en chino significa “gran oso gato”. Vive en los bosques de bambú de China y se alimenta, precisamente, de eso.

Nosotros/as hicimos unas súper máscaras de oso panda en las que tuvimos que poner mucha atención para picar bien los ojitos.

Y así nos veíamos con ellas

Pero… ¿qué eso del bambú?

Pues es una planta que vamos a ver ahora mismo…

Es una caña bastante larga. Pues, en los bosques de bambú de china, esas cañas las hay por millones y muchísimo más altas y gruesas. De hecho, el bosque más grande de bambú de China se llama “el mar de bambú” y quedamos impresionados al verlo… y es que China produce y utiliza tanto bambú que a veces se hace referencia al país como “el reino del bambú”.

El bambú también es la planta de más rápido crecimiento en la tierra.

Era nuestro turno, así que, con diferentes tonos de verde y utilizando nuestros dedos, pintamos un bosque de bambú.

Pero esta semana también tuvimos un hueco para el arte. Seguimos con Van Gogh, a quien le encantaba pintar paisajes y flores. Tiene un cuadro llamado “Campo de amapolas” 

y otro conocido por “Jarrón de amapolas”. 

Pues… ¿por qué no pintamos nuestras amapolas?

Sabemos que es una flor roja con el centro negro. Pero, ¿qué utilizamos para pintarlas? Unos rollos de cartón de papel higiénico cortando uno de sus extremos en pequeñas tiras y doblándolas para, posteriormente, plasmarlas en el papel. Y, para el centro, la estampación de un pompón con pintura negra.

Veamos el proceso…

Y, acabamos la semana como unos verdaderos artistas.

Le dimos la vuelta a nuestras mesas y forramos las patas con plástico transparente. Después, solo faltaba nuestra imaginación y todas las ganas para pintar auténticas obras de arte. Disfrutamos mucho de esta actividad. Lo que nos gusta un pincel y un montoncito de pintura…

Con esto nos despedimos hasta la próxima semana. 

¡Un saludo y muchos besos!